Salchichas de carnicero al vino blanco con cebolla

No puede ser más fácil hacer estas salchichas al vino blanco. Me atrevería a decir que dentro de las recetas son un auténtico Bet seller porque debe haber poca gente que no las haya hecho o al menos probado.  Además están ¡Ricas, ricas! Son socorridas incluso para cuando vienen visitas inesperadas y no sabemos qué poner en la mesa en poco tiempo. He dudado incluso en escribir esta receta por lo conocida que es y porque está en todas partes. Al final me he decidido porque por propia experiencia, sé que hay días que hacer el menú nos cuesta un suspiro porque no estamos nada inspirados. Así que como idea fácil, rápida y sabrosa, ahí van estas salchichas.

LA RECETA DE LAS SALCHICHAS DE CARNICERO AL VINO BLANCO
INGREDIENTES 

• 3 ó 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• 8 Salchichas de carnicero frescas
• 1 Cebolla
• 250 cc. de vino blanco
• Sal (si fuera preciso)

ELABORACIÓN DE LAS SALCHICHAS

1. Pon al fuego una sartén o cazuela con el aceite. Una vez caliente introduce las salchichas para que se doren bien por todas partes. El fuego debe estar medio/alto
2. Mientras puedes ir preparando la cebolla cortándola en láminas bastante finas.
   
3. Cuando tengas las salchichas doraditas apártalas a un plato y resérvalas.
4. Limpia con la espumadera los restos quemados que pudiera haber en el aceite tal freír las salchichas antes de meter la cebolla en la cazuela.
   
5. Incorpora la cebolla cortada y a fuego muy, muy bajo deja que poche bien despacio con la cazuela tapada.
6. Verás que primero la cebolla se va haciendo transparente para más tarde, empezar a caramelizarse tornándose de un color ámbar.
   
7. Es el momento de que incorpores salchichas y vino. Remueve, tapa de nuevo la cazuela y deja hervir hasta que la salsa reduzca bastante.
8. En unos 10/15 minutos la salsa estará espesita y las salchichas tiernas. Pincha con un tenedor para comprobar la terneza de las salchichas. Rectifica de sal si fuera preciso antes de apartar. Yo no he agregado sal alguna, los jugos de las salchichas y la cebolla han aportado suficiente sabor.
   

UN PAR DE COMENTARIOS SOBRE ESTA RECETA

• Las salchichas de carnicero son salchichas frescas de cerdo, también se llaman de carnicería. Como es lógico al estar hechas con carne picada conviene que te las vendan en tu carnicería de confianza y que las uses en la preparación lo antes posible tras la compra. Ya sabes, no conviene que los productos de carnicería elaborados con carne picada se tengan más allá del tiempo estrictamente imprescindible sin cocinar dado que se degradan fácilmente.
• Estas salchichas suelen prepararse en dos sartenes o cazuelas. En una se fríen las salchichas mientras en la otra se va haciendo la cebolla para más tarde incorporar las salchichas fritas. Yo prefiero hacerlo en la misma sartén para aprovechar del todo los jugos que van adhiriéndose a las paredes del recipiente durante la fritura. 
• Con esta finalidad de aprovechar esa sustancia, trato de raspar con la cuchara de madera el fondo y las paredes de la cazuela para que se diluyan en el aceite sobrante tras retirar las salchichas. A continuación, para evitar que la salsa quede "sucia" con los restos quemados, los elimino prácticamente del todo con una espumadera. Así queda el aceite casi del todo limpio.
• Te aconsejaría que no echaras sal hasta que las salchichas llevan cociendo un rato ya con el vino. Al reducir la salsa normalmente queda suficientemente sabrosa. De no ser así, sazona a tu gusto.
• Diría que es un buen plato para acompañar con patatas fritas o un simple puré de patatas.