Un postre del Bulli: Sopa de melón a la menta con pomelo rosa

Con una moussaka y una ensalada yo no soy capaz de tomarme un postre supercalórico así que hojee el libro de Ferran Adrià "La comida de la familia" (Ed. 2019) que todavía estaba en la mesa de mi salón después de haber escrito la receta que ofrecí en este blog del gazpacho del mismo chef. 

Enseguida que leí el título sabía que me encantaría la combinación de sabores. Es el postre del menú 31: Sopa de melón a la menta con pomelo rosa (P. 386/387).

Como siempre que preparo una receta de un gran chef echo un vistazo a Google y he visitado la cuenta de Twitter de Ferran Adrià. Precisamente hablando de esta sopa tenía colgado un Vídeo preguntándose qué problema hay en servir una misma preparación como esta sopa a modo de postre o como primero.

Los grandes Maestros lo son por algo. Está claro. Ferran Adrià se ha cuestionado siempre todo en la cocina por eso ha sido capaz de desarrollar su creatividad del modo que lo ha hecho frente a los fogones.

Bueno pues yo no voy a cuestionar al gran Chef así que este ha sido mi postre de hoy. ¿Según él podría servirse también como un primero? Sí, según él sí. Yo, personalmente lo prefiero como postre. Es cierto que lleva poca azúcar y que el pomelo contrarresta el poco dulzor pero el resultado es una mezcla que yo  (pobre mortal con cocina dónde no se deconstruye ni se hacen esfericidades, ni espumas ni aires) asimilo más esta sopa para terminar una comida que para comenzarla.

En todo caso no me extraña que este postre fuera de los más exitosos en el Bulli. Está deliciosa. Con un sabor sorprendente. Limpio, refrescante... No dejéis de probarlo. 

Y por favor, aquellos que sin casi haber comido pomelo sigáis afirmando que no os gusta, dad una oportunidad a las cosas. Es probable que las pocas veces que lo habéis tomado fuera pomelo amarillo. Un pomelo rosa de buena calidad, maduro, jugoso, si se le elimina bien la piel blanca os aseguro que no tiene ningún amargor insoportable, si no más bien ligero. Mezclado con el azúcar, la hierbabuena y el melón...eso eso, una receta de Ferran Adrià.

Por eso diría que no vale si es un pomelo que no es rosa. Esta variedad proporciona un dulzor y una suavidad nada parecida a la que aportaría un pomelo amarillo muchísimo más amargo y ácido.

RECETA DE LA SOPA DE MELÓN A LA MENTA CON POMELO ROSA

INGREDIENTES (Para 6 raciones)

• 1 Melón (del bueno)
• 10 hojas de menta fresca
• 2 Pomelos rosa grande *
• 3 Cucharadas de azúcar

ELABORACIÓN DE LA SOPA DE MELÓN

1. Elimina la piel del melón y corta en trozos. Reserva. Lava bien las hojitas de menta.
2. Exprime un pomelo e incorpora el zumo al recipiente dónde vayas a hacer la sopa. 
   
3. Incorpora a un cacharro el melón, el zumo, el azúcar y el zumo del pomelo y bate bien hasta lograr una mezcla suave y lisa.
4. Cuela el gazpacho para eliminar posibles pepitas o pieles del zumo. Pon el gazpacho en el frigorífico unas horas para que se enfríe bien.
   
5. A la hora de emplatar: Pela el otro pomelo rosa eliminando el albedo (parte blanca de la piel) dejando al descubierto la carne de la fruta. insertando un cuchillo muy bien afilado entre el tabique que separa dos gajos ahonda con la hoja hasta el centro. Haz igual del otro lado del gajo hasta poder sacarlo. Ve reservándolos en un plato.
   
6. Pon unos cuantos gajos de pomelo en el plato, vierte la sopa sobre ellos y adorna con unas hojas de menta. Sirve bien frío.

DUDAS Y SUGERENCIAS PARA LA SOPA DE MELÓN A LA MENTA CON POMELO ROSA

• ¿Vale cualquier melón? ¿Puedo aprovechar un melón que me haa salido "apepinado"? Pues no. Vamos, no debes si no quieres arriesgarte a que te salga algo que no tiene nada que ver con esta receta. Mi consejo personal es que el melón sea del que sale rico, rico.
• No seáis aprovechados y queráis usar un melón de esos que ya están demasiado maduros, que tienen sabor que yo digo "a medicamentos" o del tipo "pepino" (insípido y duro, vamos). Con uno así probablemente no os guste esta sopa.
• ¿Qué tipo de pomelo compro? En cuanto al pomelo, también, tiene que ser rosa. Las variedades amarillas son mucho más ácidas y amargas. 
• ¿Cómo elegir un buen pomelo? Además de los evidentes tonos rosados de su piel que delatarán qué tipo de pomelo es, a la hora de elegirlo, desechar los que pesen poco. Un pomelo de poco peso es signo de que tiene dentro poco jugo. La piel no debe ser rugosa en cuyo interior suele tener unas membranas ásperas y bastas entre los gajos. Elije los de piel fina.
• * ¿ Por qué me he atrevido a cambiar la cantidad de pomelo que indica la receta original? Lo explico. En el libro "La comida de la familia" para 6 raciones indica 1 pomelo y ya a nivel profesional, para 20 raciones, indica 1,5 kg. De otra parte cuando habla del emplatado dice dos gajos en los boles, si la preparación es para seis personas, debería yo haber sido capaz de sacar 12 gajos de un pomelo (cosa para mí imposible) pero además extraer de él el zumo necesario para mezclarlo en la sopa con el melón. Por eso he indicado dos pomelos. Uno para los gajos y el otro para el zumo que lleva la sopa.
• Según Ferran Adrià se puede preparar más cantidad de la necesaria y servirla como zumo a la hora del desayuno.