Anchoas en salmuera de L' Escala (Como limpiarlas)

Hoy quiero presentaros un producto de Carrefour que casi siempre tengo en mi frigorífico. Se trata de las anchoas en salmuera de L`Escala. Las presentan en botes de cristal y las podéis encontrar en las zonas refrigerada junto a las lastas de anchoas clásicas.
Acabo de consultar en la página web de estos hipermercados y el precio es de 5,82 € el bote de 475 gramos (que por supuesto, una vez limpias quedan en bastante menos). Teniendo en cuenta que es un producto de muy buena calidad creo que tienen un precio más que razonable.
Comprobareis que el bote lleva colgada una etiqueta de la empresa conservera que las elabora, se trata de Fills de J.Callol i Serrats, S.L. es una empresa familiar fundada en 1847 ubicada en el municipio de l’Escala. (Una localidad de la comarca “Alt Empordà” en la provincia de Girona en Cataluña).
 
Encuentro que es muy socorrido tener un botecito que siempre te permite preparar una cena un tanto especial.

¿Una pega? El tiempo que lleva su preparación. Se te tiene que haber ocurrido prepararlas un buen rato antes de la hora de comer o cenar. Pero merece la pena la inversión. Para quién no conozcáis este producto debo aclarar que el proceso de preparación y el modo en el que se presentan no tiene nada que ver con las anchoas en aceite elaboradas en el Norte de España que solemos adquirir listas a para su consumo.
Estas anchoas se presentan enteras, con espinas incluso dentro de un bote con la salmuera en la que se han curado. Por tanto deberemos proceder a una limpieza escrupulosa antes de consumirlas.
Como digo es entretenido el proceso pero merece la pena porque el resultado es un plato de lujo.
No me enrollo más, voy a explicaros a continuación el proceso para limpiarlas y prepararlas que utilizo yo y en otra entrada os doy una receta para preparar un aliño sabrosísimo y rápido de cocinar.
  1. Lo primero que hago es limpiar el fregadero a conciencia con agua caliente y jabón ya que utilizo un par de escurridores directamente sobre él.
  2. Sobre uno de los coladores colocado en el fregadero vuelco todo el contenido del bote, sal, agua y anchoas... y les doy un primer "baño" bajo el chorro del grifo con agua fría. Con cuidado de no romper las anchoas las separo bajo el agua con los dedos ya que vienen un poco "apelotonadas", de esta manera elimino la mayor parte de sal. Voy separando anchoa a anchoa y las voy echando en el segundo colador que tengo preparado. Limpio bien el primer colador que acaba de quedarme libre.
  3. A continuación eviscero todas las anchoas bajo el chorro de agua y las voy echando en el colador que acabo de limpiar del uso anterior.
  4. Cuando las tengo todas evisceradas les quito la espina central a todas cambiándolas al otro colador según voy desespinándolas.
  5. Queda ahora el trabajo más meticuloso. Eliminar las espinitas que hay en la zona ventral. Aquí ya depende de vuestra paciencia. Cuando tengo tiempo y ganas utilizo unas pinzas que tengo reservadas en la cocina para usos culinarios (es la misma pinza que uso para limpiar de espinas el salmón cuando lo marino). Si queréis acelerar un poco este proceso podéis utilizar las tijeras de cocina a costa eso sí, de sacrificar parte de la carne.
  6. Cuando terminéis de limpiar los filetes de anchoa no debe quedar otra cosa que la carne del pescado y deberéis haber eliminado cualquier espina o resto que luego resulte desagradable al paladar cuando las consumamos.. Durante todo el proceso deberéis actuar con cuidado para no romper los lomitos de las anchoas.
  7. Aunque no lo indica en las instrucciones de preparación en el bote pienso que si las aliñamos inmediatamente después de limpiarlas quedan excesivamente saladas, al menos para mi gusto así que las pongo "en remojo" en agua bien fría en un recipiente de cristal que tapo con film de cocina y que dejo en el frigorífico hasta que las voy a aliñar. El tiempo es variable y si os digo la verdad va un poquito en función de la hora de la cena. Si me he acordado de prepararlas por tarde y cuento con tiempo el remojo lo alargo a dos horas (en medio le cambio el agua una vez) pero si tengo prisa... con una horita larga también quedan bien.
  8. Escurro las anchoas en un colador. Pongo sobre la tabla de corte tres o cuatro hojas de papel de cocina y sobre él echo las anchoas escurridas. Trato de extenderlas para que no queden unas sobre otras. A continuación las seco con papel de cocina del modo siguiente: Pongo otras cuántas hojas de papel de cocina sobre el pescado y presiono ligeramente con cuidado de no aplastarlas, tratando de eliminar la mayor cantidad posible de agua.
  9. Ahora ya se pueden aliñar. Con un simple chorro del mejor aceite de oliva virgen extra que tengáis quedan estupendas sobre una rebanada de pan tostado restregado con un tomate bien maduro pero si tenéis tiempo y ganas os aconsejo que las preparéis como os explico en la entrada  Anchoas en salmuera de L´Escala aliñadas pinchando aquí. Os prometo que quedan de lujo!!!

 

Crema de champiñones

Me encantan las cremas de verduras en invierno!!! Además, son tan rápidas de hacer... Esta receta la voy a explicar para hacerla por el sistema tradicional y en Thermomix.




INGREDIENTES
  • 50 gramos de AOVE
  • 1 Cebolla grandecita
  • 500 gramos de champiñones
  • 250 gramos de caldo de verduras o agua
  • Sal
  • Pimienta negra molida
Así haríamos esta crema con la Thermomix:
  1. Pelamos la cebolla, la cortamos en octavos y la echamos en el vaso de la Thermomix. Trituramos unos segundos a velocidad 4.
  2. Agregamos el AOVE (aceite de oliva virgen extra) y programamos 8 minutos, velocidad 1, Temp. Varoma
  3. Mientras se hace la cebolla iremos limpiando los champiñones. Los echaremos al vaso y trituraremos a velocidad 5 unos segundos. No deben quedar hechos una crema, solo troceaditos.
  4. Agregamos la sal, la pimienta negra y programamos 5 minutos, velocidad 1, temperatura Varoma
  5. Incorporamos ahora los 250 gramos de caldo o agua y programamos 10 minutos, Velocidad 1, Temp. Varoma
  6. Por último, trituraremos todo a Velocidad 9 durante un par de minutos. Si vemos que está muy espesa agregamos un poco más de caldo o agua.
  7. Rectificamos de sal y servimos bien caliente. Si lo deseamos podemos agregar unos picatostes, quedan de lujo!!
Y así haríamos esta crema por el "sistema tradicional":
  1. Pelamos la cebolla y la cortamos finita.
  2. Ponemos a calentar los 50 gramos de AOVE (aceite de oliva virgen extra) en una cacerola. Cuando está caliente agregamos la cebolla picada y dejamos que se poche lentamente removiendo de vez en cuando.
  3. Mientras se hace la cebolla iremos limpiando los champiñones. Los cortaremos en trocitos bastante pequeños. y los reservaremos.
  4. Cuando la cebolla está pochada agregamoslos champiñones, la sal, la pimienta negra y dejaremos que se hagan durante 5 minutos.
  5. Incorporamos ahora los 250 gramos de caldo o agua. Removeremos bien y dejaremos que cueza unos 10 minutos.
  6. Por último, trituraremos todo con una batidora a potencia máxima hasta conseguir una crema muy fina. Si vemos que está muy espesa agregamos un poco más de caldo o agua.
  7. Rectificamos de sal y servimos bien caliente. Si lo deseamos podemos agregar unos picatostes, quedan de lujo!!

Sushi hecho en casa paso a paso

El título de la entrada lo dice todo. No pretende ser un Sushi "ortodoxo", como el que haría un maestro japonés. Seguramente horrorizará a los entendidos y habré cometido algún que otro sacrilegio en el proceso...pero a mí, que no soy ninguna experta en cocina japonesa, me parece aceptable a nuestro paladar occidental. Sé que lleva productos de buena calidad y que lo comemos recién hecho. Todo esto me "compensa" que quizás infrinja algún precepto de la cocina japonesa.
Solo pretendo ofrecer una explicación sencilla y asequible a quién se acerca por primera vez a este tipo de comida oriental. Puede ser divertido ofrecer a nuestros amigos o a la familia una cena algo exótica y creo que el resultado para quién no es un entendido es más que digno.
Para ser sincera debo ponerle alguna "pega" a mi sushi pero que prometo corregir con el tiempo y es que adolece de la "perfección" en la presentación que tiene un sushi hecho por un cocinero japonés.
A ver si estas Navidades alguien de la familia o algún amigo me regala alguno de los muchos "cachivaches que hay para facilitar su realización.
Para invitar a todos a prepararlo quiero aclarar algo que constituye muchas veces el motivo por el que muchos no se animan a cocinarlo y es que asocian el sushi necesariamente con la "obligación" de comer pescado crudo. Sencillamente esto no es cierto. Algunas variedades de sushi se preparan con pescado crudo, pero no todas.
Bueno, sin más preámbulo, vamos por partes. Primero vamos a hacer un pequeño repaso a los utensilios e ingredientes que necesitaremos. Luego nos meteremos en faena.


Morcilla de arroz con pimientos "del piquillo" dulces

Es un plato bien socorrido, de esos que se preparan en un momento

INGREDIENTES:

 * 1 Morcilla de arroz cortada en rodajas gorditas
* Unos cuántos pimientos "del Piquillo" cortados en trocitos
* Un par de cucharadas de azúcar
* Un poquito de harina
* Un chorrito de aceite de oliva virgen extra



Un "truquillo" para que la morcilla no se pegue al asarla en la sartén es enharinar un poquito las rodajas.

Echar un par de cucharadas de azúcar sobre los pimientos, remover bien y calentar en el microondas un par de minutos para que el azúcar se disuelva bien. Reservar.

Poner a calentar una sartén con unas gotas de aceite. Cuándo esté bien caliente poner a dorar las rodajas de morcilla hasta que tengan un bonito color dorado.
Cuándo estén echas por un lado, darles la vuelta y dorarlas por el otro.

Poner las rodajas de morcilla asada sobre el plato dónde las vayamos a servir y decorarlas con un poco de pimientos dulces sobre cada una de ellas. El contraste entre el sabor de la morcilla y el dulce de los pimientos es exquisito.


"Escalibada" (Ensalada catalana de verduras asadas)

La escalibada es un plato muy típico de la cocina catalana. En realidad tradicionalmente las verduras se asan al rescoldo de una buena lumbre pero a falta de ello en el horno puede salirnos una deliciosa ensalada de verduras asadas.
Es importante, como casi siempre, que la materia prima sea buena. Los pimientos rojos de los de piel fina y "cuero" gordito, que son los que dan más carne y son más dulces, las cebollas tardan en hacerse así que yo las pongo chiquitas. La cabeza de ajos que sea grande, de dientes de buen tamaño y a poder ser de "Chinchón" una variedad que aquí en Madrid se adquiere muy fácilmente en cualquier verdulería. Los tomates maduros y carnosos...y por supuesto, un aceite de oliva virgen extra que no falte.