¿Has leído alguna vez una magnífica receta de un helado delicioso pero cuando llegas a lo de "heladera" te dices ¡No tengo! o no tengo ganas de estar sacando y metiendo la mezcla del congelador y batiendo? ¿Seguro que sí! Lo que vamos hacer hoy es un biscuit. No necesitarás máquina alguna para congelarlo, ni será necesario que lo batas varias veces mientras congela y permanecerá cremoso y con una extraordinaria untuosidad por muchas horas que lo tengamos en el congelador. Anímate a preparar este fácil y delicioso biscuit de higos secos y nueces. Te anticipo que no será el último que prepares cuando compruebes lo ricos que están.
Los helados se elaboran con una base de crema (suele ser crema inglesa o natillas) a base de azúcar, huevo y leche) a la que se incorporan purés de fruta, aromas, siropes, etc. Para lograr su textura es imprescindible usar una heladera para, con su movimiento constante mientras congela, ir incorporando aire a la mezcla. Sin este aire al congelar formarían un bloque helado duro que en nada se parecería a un cremoso helado. Pensemos en los típicos "polos" de cítricos, o en un granizado. Todos están helados pero su textura difiere de unos a otros.
También se pueden hacer incorporando el aire necesario batiendo varias veces durante el proceso de congelación. Se mete la mezcla un tiempo a enfriar en el congelador, se saca la mezcla, se bate bien y se vuelve a introducir en el congelador. Así hasta que llegue a congelarse sin haber formado cristales de hielo y conservando su textura suave y cremosa.
El biscuit glacé tienen eso ¡Que es más majo! Se conforma con que le incorpores el aire necesario mientras lo elaboras y luego ya no precisa más que unas horas en el congelador. Es así de facilón.
Esa es precisamente la diferencia con el helado. En el caso del biscuit, su propia elaboración permite que al congelar no forme cristales de hielo. El aire se lo incorporamos mientras realizamos la mezcla, agregándole yemas muy bien batidas y la nata montada (a veces también se incorpora las claras a punto de nieve). Con este aire incorporado a la mezcla es suficiente para que a pesar de congelarse no se formen los cristales de hielo y permanece suave, esponjoso y deliciosamente cremoso.
Debo decir que técnicamente no es tan simple y que el proceso de la elaboración de helados es mucho más complejo y está en relación además de con el aire, con las proteínas, azúcares y grasas de las que se compone su mezcla. Pero para entendernos esta explicación vale.
Otra diferencia es que la sensación de frío al degustar el helado es superior a la del biscuit.
LA RECETA DEL BISCUIT DE HIGOS Y NUECES CON SALSA DE CHOCOLATE
INGREDIENTES (Para 6 personas)
- 150 gr de higos secos
- 25 gr de nueces peladas y troceadas
- 175 ml de vino dulce (tipo Moscatel)
- 4 yemas de huevo
- 2 cucharadas de azúcar
- 250 ml de nata para montar (35 % MG)
- 50 ml nata líquida para el chocolate
- 125 gr de cobertura de chocolate
- Unas hojas menta fresca para adornar
ELABORACIÓN DEL BISCUIT DE HIGOS SECOS Y NUECES
- Elimina el rabillo de cada higo. Ponlos a macerar cortados (o enteros, al gusto) en trozos junto con las nueces en el vino dulce. Déjalo varias horas para que se hidraten y tomen el sabor del vino.
- Cuando hayan pasado unas cuantas horas y los veas hinchados e hidratados vuelca nueces, higos y licor en el vaso de la Thermomix (o de la batidora) y tritura bien hasta conseguir una pasta con la mínima textura. Reserva.
- En un bol de buena capacidad pon las 4 yemas y el azúcar bate con batidora eléctrica de doble varilla hasta que blanqueen y doblen su volumen.
- Incorpora los higos triturados y mezcla con espátula con movimientos envolventes hasta que tengas una pasta homogénea. No batas, solo movimientos desde abajo hacia arriba.
- En otro bol amplio pon 250 ml de nata liquida y monta la nata ( Puedes seguir la forma de hacerlo paso a paso en este blog pinchando en el enlace). Cuando esté a medio montar agrega de una en una las dos cucharadas de azúcar batiendo en medio.
- Ve agregando la nata ya montada a la mezcla de higos y yemas con azúcar y con movimientos también envolventes ve incorporando poco a poco. No agregues toda la nata de golpe ni añadas más nata hasta tener mezclada la anterior.
- Rellena los moldes de silicona con la mezcla y mete en el congelador durante al menos 8/10 horas (tapados con un film para que no cojan olor).
- Cuando vayas a servir los biscuit pon un cazo con agua al fuego. Cuando hierva baja el fuego al mínimo y mete dentro un bol que contenga el chocolate troceado. Mueve con espátula hasta el que chocolate esté bien fundido.
- Agrega entonces los 50 ml de nata liquida restante y remueve hasta incorporarla totalmente al chocolate. Retira el bol del cazo con agua.
- Desmolda los biscuit y sirve con el chocolate fundido caliente por encima y unas hojas de menta. Sirve inmediatamente.
DUDAS Y SUGERENCIAS SOBRE LA RECETA DEL BISCUIT
- Montar nata es una técnica básica de cocina que repetimos muchas veces en multitud de elaboraciones. Por eso tiene su correspondiente entrada, así evitamos repetir una y otra vez los proceso. Si no lo has hecho nunca y no sabes el proceso, consulta cómo montar nata paso a paso y de manera muy simple pinchando en el enlace.
- ¿Por qué pones tan poco azúcar al montar la nata de este biscuit? Si comparas la cantidad de azúcar que figura en este enlace de cómo montar nata verás que es muy superior al azúcar que incorporo al montar la nata para este biscuit. La razón es porque higos y vino dulce considero que ya tienen suficiente azúcar pero si a ti te gustan las preparaciones más empalagosas no hay problema en que al montar la nata agregues algo más de azúcar.
- ¿Y si no tengo higos secos o no encuentro en el super? Creo que una buena idea para tener otro biscuit muy distinto pero igualmente delicioso es sustituir el vino y los higos por turrón.
- ¿Es imprescindible el chocolate? Si tú no eres golosa como yo, sí, puedes prescindir de él pero te adelanto que la mezcla de sabor, textura y temperaturas entre el biscuit y el chocolate caliente creo que es el secreto para que este postre resulte tan endemoniadamente bueno.
- ¿Quieres hacer todavía más "pecaminoso" este biscuit? Agrega un chorrito de tu licor preferido al chocolate... y prepárate para la penitencia Ja!
- Un consejo, degusta enseguida este biscuit. El chocolate al enfriar irá endureciéndose y no resultará tan agradable de comer como cuando está calentito y se mezcla suavemente en cada cucharada con el biscuit.
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