Cómo montar nata líquida paso a paso

Hoy traemos otra preparación que incluimos en las técnicas básicas de cocina que es preciso conocer porque forma parte de muchas elaboraciones. Hacer nata montada es realmente fácil pero también es verdad que hay que tener en cuenta una serie de cuestiones y seguir una serie de pasos para que resulte deliciosa y logremos en pocos minutos convertir una simple nata líquida en una deliciosa preparación llena de suavidad  y delicioso sabor. De eso vamos a hablar (y a ver) hoy. Venga, vamos a ello.

Os recomiendo siempre que leáis las dudas y sugerencias antes de poneros a realizar las recetas pero en este caso os lo recomiendo aún más encarecidamente. En ocasiones se nos complican las cosas porque desconocemos un paso previo necesario simplemente o no hemos tenido en cuenta un detalle que da al traste con la preparación.

En las dudas y sugerencias que suelo incluir tras las recetas os hablaré de todos los detalles, cuestiones, trucos... para que no tengáis ningún problema a la hora de montar vuestra nata. Incluso será fácil hacerlo para que el que no está acostumbrado a acercarse a los fogones.

Montar nata es tan fácil que la receta será muy cortita. Es más importante las cosas que hay que tener en cuenta que la receta en sí misma. 

EL PROCESO DE MONTAR NATA LÍQUIDA

INGREDIENTES

• Nata líquida para montar (Mínimo 35% MG)
• Azúcar (75 gr azúcar por cada 200 cl de nata)

PROCESO PARA MONTAR LA NATA

1. Pon durante unos minutos (aprox. 10) el recipiente que vayas a utilizar en el congelador. Preferiblemente que sea de metal o cristal. 
2. Aunque la nata la hayas tenido en el frigoriico, mete el tetrabrick de nata líquida  en el congelador unos diez minutos para que cuando lo utilices esté bien frío.
3. Pon la nata líquida en el recipiente y comienza a batir con las batidora eléctrica de varillas (a velocidad mínim). No espesará instantáneamente. Primero comenzará a hacer una especie de espuma. Sigue batiendo.
   
4. A los pocos minutos verás que ya comienza a espesar, todavía no está montada del todo pero ya tiene cuerpo y consistencia. Si inclinas un poco el recipiente, la nata en conjunto se desplaza hacia el lado que inclinas el bol.
5. Es el momento de incorporar el azúcar. Añade no más de un par de cucharadas cada vez y sigue batiendo. Tan pronto esté incorporada el azúcar ve agregando más y bate hasta terminar el azúcar.
   
6. Lleva cuidado de no pasarte en el batido. Ve comprobando el espesor. Llegará un momento en que cuando saques las varillas de la nata forma picos duros (con cuerpo y consistencia) y no se despegan de las varillas. Si vuelcas el recipiente la nata no caerá, permanecerá pegada al bol. Es el momento de parar de batir. Tu nata está ya montada. Si sigues batiendo a partir de este punto es posible que el suero y la nata se separen y la preparación se convierta en mantequilla. 
   

DUDAS Y CONSEJOS PARA MONTAR LA NATA

• ¿Qué tipo de nata líquida compro para hacer nata montada? En teoría se puede montar casi cualquier nata líquida. Pero del porcentaje de materia grasa que tenga dependerá la facilidad que tendrás para montarla. Las natas líquidas con bajos porcentajes en materia grasa son más adecuadas para cocinar. Por eso te aconsejo que compres nata líquida con un cuyo porcentaje de materia grasa no sea inferior a 35. En el envase podrás leerlo así: 35% MG
  
• El otro factor determinante además de la grasa es la temperatura de la nata. Cuando te dispongas a montar nata debe estar muy, muy fría. Aunque todos conservamos la nata en el frigorífico te aconsejo que previamente a montar la nata, metas el tetrabrick unos 10 minutos en el congelador. Así tendrás seguridad de que tu nata está perfectamente fría. Esto te ayudará en el proceso de montaje.
• ¿También el recipiente debe estar muy frío? Sí. Mételo diez minutos en el congelador junto con la nata antes de comenzar a montar.
• ¿Qué tipo de recipiente es el adecuado para montar la nata? Es esencial que sea suficientemente amplio para albergar el gran volumen que llegará a tener la nata cuando se monte. Piensa que aumenta mucho su volumen y que si no es suficientemente grande, según vayas montando la nata puede que no quepa en él. Es imprescindible que esté perfectamente limpio y sin resto alguno de grasa ni de ninguna otra materia. Es preferible que sea de cristal o metal. Los de plástico no son tan prácticos porque es fácil que adquieran olores que luego se pueden transmitir a la nata.
• ¿A mano con varillas, batidora de brazo, con batidora eléctrica, con robot de cocina? Teóricamente puedes montar tu nata a mano con unas simples varillas, indudablemente. Eso sí tendrás que tener mucha, mucha, paciencia y una gran resistencia de tu brazo. Lo cierto es que no es práctico hacerlo a mano. También puedes usar un robot pero yo no te lo aconsejo porque suelen tener mucha potencia y si no tienes experiencia y lo dejas solo batiendo a mucha potencia es fácil pasarse en el batido y que lleguemos a tener mantequilla en lugar de nata montada. Para mí lo ideal es la batidora eléctrica de dos varillas. Creo que con ella se controla perfectamente el batido y tienen la potencia necesaria para ahorrarnos el proceso (y el cansancio) de hacerlo a mano y a la vez podemos controlar muy bien y dejar de batir tan pronto veamos que la nata ya está montada. Si no tienes, puedes usar la batidora eléctrica de brazo poniéndole el accesorio de las varillas.
• Ten en cuenta que es preferible hacer de una sola vez no mucha cantidad. Si necesitas montar un litro completo de nata líquida, te aconsejo que lo hagas en dos veces. Así no necesitarás un recipiente tan grande.
• ¿Cómo se abre el tetrabrick? Este es un asunto de importancia. Debido a que los tetrabrick están almacenados durante tiempo en las estanterías, la materia grasa que es más densa, suele irse al fondo del recipiente y quedarse adherida al fondo. Si no tienes en cuenta este detalle puede que viertas en el bol solo la parte líquida tirando el brick con toda esa materia grasa que necesitas para poder montar tu nata. Trabajarás así, sin saberlo, con una nata con un porcentaje graso muy inferior. Puedes verter la nata liquida en el bol retirando el tapo. Pero eso sí, cerciórate de que la grasa, que suele estar en el fondo del recipiente, está perfectamente mezclada con el resto para que todo el contenido vaya a parar al bol. Para ello agita bien el tetrabrick, o mejor, ábrelo por la parte inferior despegando una de las esquinas y cortando con unas tijeras. Ello te permitirá remover bien con una cucharilla y que toda la materia más densa que suele estar pegada a esta zona salga cuando viertas el contenido del brick sobre el bol.
  
• ¿Necesito un azúcar especial? No. Es cierto que se integra más rápidamente el azúcar glas pero la verdad es que yo suelo utilizar azúcar blanquilla normal y corriente y me funciona perfectamente.
• Incorpora el azúcar en varias veces. No eches todo el azucar de golpe. Es mejor incorporar un par de cucharadas, batir un momento y volver a agregar más azúcar.
• ¿Cuánto azúcar por cantidad de nata? Eso depende del gusto personal. A mí no me gustan las cosas empalagosas en general pero en el caso de la nata, aún menos. No suelo utilizar en mis recetas una cantidad excesiva de azúcar. Para mí la nata montada debe saber dulce pero que siga sabiendo a nata. Depende también del tipo de preparación. No es lo mismo montar nata para rellenar un bollo que hacer nata montada a la que se van a incorporar más elementos dulces. En este segundo caso se precisa de algo menos de azúcar. En general yo diría que con 75/100 gr (unas 3/4 cucharadas colmadas) de azúcar es suficiente para 250 cl de nata líquida.
• ¿Puedo incorporar desde el principio el azúcar a la nata? No. Bate primero unos minutos y cuando la nata esté ya un poco montada, pero aún no tenga la consistencia que necesitas, será el momento de empezar a incorporar el azúcar poco a poco.
• ¿Cuándo sabré que la nata está ya montada? Dicen que la prueba final es poner el bol boca abajo del todo y si la nata no cae, es que está montada. A ver. Esto es cierto pero si no tienes experiencia y se te ocurre hacer eso puedes armar una buena en la cocina (en ocasiones he visto en algún vídeo incluso ponérselo encima de la cabeza) !Qué arriesgada es la gente, por Dios! No. No es necesario pasar esa "prueba de fuego". Verás, comprobarás que cuando lleves unos tres cuatro minutos batiendo (depende de la potencia de tu máquina) la nata ya toma consistencia y cuerpo, que si inclinas el recipiente hacia un lado, la nata no se desplaza rápido si no en bloque hacia ese lado. Estando así, al levantar las varillas de la nata, ésta se queda adherida a ellas pero todavía no queda gran cantidad. Si sigues batiendo unos minutos más (pocos) la nata habrá espesado, si inclinas el bol ya no se desplazará y si separas las varillas de la nata en la superficie se forman lo que se llaman "picos" que ya son duros, consistentes. Igualmente en tus varillas verás como la nata forma otro pico hacia abajo y que no cae al bol aunque la mantengas en el aire varios segundos.
• ¿Qué ocurrirá si sigo batiendo después de que la nata esté ya montada? Si sigues batiendo empezará un proceso de separación del suero y la grasa, eso es lo que se busca cuando tratamos de hacer mantequilla. Si esto te ocurre, ya no hay solución. Pero ni se te ocurra tirar la preparación. Sigue batiendo un poco más hasta que suero y grasa se separen del todo y tengas una deliciosa mantequilla que podrás utilizar con las tostadas del desayuno. Consulta si lo deseas el proceso para hacer mantequilla casera pinchando en el enlace.