Por fin he logrado la receta del mejor y más húmedo pastel de zanahorias. Casi todos los pasteles me encantan pero diría que no hay ninguno que me guste más que este. Esta receta, si la seguís paso a paso, fielmente....os aseguro que conseguiréis un pastel de miga tierno, jugoso, con un sabor delicadamente especiado, suficientemente dulce pero no empalagoso...Es fácil y rápida, no tiene ingredientes complicados de conseguir y el éxito está garantizado. Os animáis? Pues venga...
Recetas de cocina paso a paso con fotografías. Cocina española fundamentalmente, casera y fácil. Poco artificiosa y que podría ceñirse a lo que se conoce como cocina de mercado. Deberíamos volver a una cocina que gire alrededor de los alimentos de temporada.
La Receta del mejor Pastel de Zanahoria increíblemente húmedo (Carrot Cake )
Bebida (refresco o infusión) natural de jengibre, limón y azúcar
Muy simple, muy sencillo y muy rico este refresco natural. Es muy rápido de preparar, no contiene ingredientes que no sean naturales y es muy saludable. Dicen que tiene propiedades "detox". Yo no lo sé....sé que es rico y que sin gas, sin azúcares añadidos....es mucho mejor que un refresco comprado. En todo caso tanto el limón como el jengibre son muy depurativos.
Crema pastelera rápida de hacer
Hoy hacemos una crema pastelera con una receta clásica pero hecha de forma muy rápida. Es una de las preparaciones más usadas en repostería. Con ella preparamos deliciosos postres, pasteles, tartas, canutillos...un sinfín de tentaciones. Apenas cinco o seis minutos y tendremos lista nuestra crema. Merece la pena hacerla a mano. La hecha en casa es infinitamente mejor que la hecha con preparados del super.
Mejillones al roquefort. Una receta rápida, fácil y muy sabrosa.
Son sumamente fáciles de hacer, se preparan en un momento y están requetebuenos. Qué más se puede pedir. Es una receta de esas para plantearse cuando uno no tiene muchas ganas de cocinar pero quiere algo bien rico. Tan solo se precisa tener unos mejillones, nata para montar y cualquier queso azul. Quieres saber cómo se preparan? Pues adelante...
Tarta de mousse de fresas sin horno
- 150 gr galletas tipo María
- 90 gr. chocolate negro
- 75 gr. mantequilla
- 500 gr. fresas frescas o congeladas
- 2 cucharadas zumo de limón
- 100 gr. azúcar
- 250 g de nata para montar (mínimo 35% de grasa)
- 5 hojas de gelatina
- 100 gr nata para cocinar
- 100 gr. chocolate negro
- Funde la mantequilla en el microondas durante 30 segundo a máxima potencia.
- Tritura con la Thermomix las galletas, la mantequilla fundida y el chocolate troceado. Comprueba que la mezcla ha quedado finamente molida. De lo contrario tritura unos segundo más.
- Unta con un poco de mantequilla el fondo y las paredes de un molde desmontable de 18 cm. Introduce la mezcla de galletas en el fondo, alisa bien con una cuchara o el fondo de un vaso hasta conseguir una superficie compacta y lisa.
- Mete el molde en el frigorífico mientras sigues elaborando la tarta para que se solidifique de nuevo la mantequilla.
- Lava y seca perfectamente la Thermomix. Pulveriza el azúcar.
- Introduce las fresas congeladas (o frescas) y tritura hasta obtener la textura que te guste. Yo prefiero con una pizca de textura pero hazlo a tu gusto. Reserva.
- Pon en remojo en agua fría las hojas de gelatina mientras prosigues elaborando la tarta. Al menos diez/quince minutos.
- Separa de los 250 cl de nata para montar, unos 50 cl. Reserva este poquito de nata sin montar.
- Monta los 200 cl restantes de nata. Puedes consultar la forma de hacerlo en este blog pinchando en el enlace dónde te explico paso a paso la manera de montar nata líquida.
- Cuando las láminas de gelatina lleven en remojo al menos 10/15 minutos retíralas del agua. Calienta los 50 cl de nata líquida que reservaste y disuelve en ella las láminas de gelatina escurridas. Remueve bien.
- Ve incorporando en tres o cuatro veces la gelatina sobre la nata montada. Echa un poco, remueve con espátula con movimientos envolventes de manera muy suave y delicada para que la nata no se baje. Ve incorporando más gelatina mezclada con nata caliente hasta terminar.
- Una vez perfectamente integrada la nata con gelatina sobre la nata montada ve incorporando poco a poco las fresas batidas. No agregues más fresas hasta que las anteriores estén perfectamente integradas. Mezcla con espátula también con movimientos envolventes para que el aire incorporado a la nata al montarla, no se baje.
- Saca el molde que ya tienes con la base de galletas del frigorífico y rellénalo completamente con la mezcla de nata montada, gelatina y fresas.
- Da pequeños golpes con el molde lleno sobre la encimera para que si hay algo de aire suba a la superficie y salga de la preparación. Alisa bien la superficie y reserva en el frigorífico al menos 6/7 horas hasta que la mezcla haya cuajado totalmente por efecto de la gelatina (Mejor hasta el día siguiente).
- Un rato antes de servir saca la tarta del frigorífico. Desmolda sobre un plato.
- Pon a calentar 100 cc de nata líquida. Trocea el chocolate y échalo sobre la nata caliente. Deja reposar algo más de un minuto y remueve hasta fundir completamente el chocolate.
- Echa el chocolate por encima de la tarta y decora con unas fresas y unas hojas de albahaca.
Huevos rellenos huevos mimosa
Vichyssoise (Crema fría de puerro y patata)
Creo que los puerros son una de las hortalizas de sabor más delicado. Nada que ver con sus primos hermanos (también liliáceas como él) como la cebolla o el ajo. A mí me gustan mucho y por ello los uso con frecuencia en mi cocina. Podéis ver varias recetas en este blog dónde se usa el puerro. La primera que os ofrezco es la pariente cercana de esta que nos ocupa hoy, la Porrusalda, una sopa de puerro y patata también (y en ocasiones zanahoria o calabaza), como la Vichyssoise, pero que se toma caliente y que no se tritura. Pero también en conserva están delicioso, podéis consultar la receta: Conserva de berenjenas y puerros. Por último, os animo a que probéis estos deliciosos Puerros agridulces, os van a sorprender, hacedme caso.
Conejo al ajillo con patatas fritas
A mí me gusta el conejo al ajillo con la carne blandita y melosa, bien impregnada en su salsa. Para que la carne esté melosa es importante freírla pero no tanto que se reseque. Con dorarla en el aceite en suficiente, luego, en la salsa, con una cocción de algo más de media hora tomará todo el sabor de ella y no quedará nada seco.