No todo el mundo tiene horno o no siempre lo tenemos libre para hacer el flan porque está ocupado con alguna preparación haciéndose dentro. En este caso me gustaría que quienes no hacen flan por el tema del horno comprueben que no hay que renunciar a un postre tan delicioso por ello y que es si cabe más fácil hacerlo en una simple cazuela que en el horno.
No hace mucho compartí con vosotros un flan de huevo cremoso al horno. Este de hoy se distingue en algunos pequeños detalles: Tiene el mismo número de yemas que de claras; no está aromatizado con canela ni cáscara de limón o vainilla; la mezcla se ha distribuido en flaneras individuales y por último, no se utiliza el horno para cuajarlo si no una simple cazuela.
Los flanes son realmente fáciles de hacer. En horno, al vapor, en cazuela...Eso si, hay que tener en cuenta una serie de consideraciones. En aquella receta os las explicaba y hoy vamos a volver a repetirlas porque prácticamente nada cambia a la hora de hacer un flan cuajado al horno o uno en cazuela. Ambos están hechos al baño María.